Tarta de queso con lima y gelatina con kiwi (sin hornear). ¡Vale la
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Poner la gelatina en 100 ml de agua y dejar que se hinche durante 10 minutos (o según las recomendaciones del fabricante que figuran en el sobre).
Luego lo ponemos a fuego pequeño y lo calentamos a un máximo de 50ºC – ¡no hace falta que hierva! No olvides remover el líquido hasta que los granos de gelatina se disuelvan por completo. Deja enfriar.
Pase el queso por un colador con anticipación para obtener una consistencia uniforme (no granulada).
Mezclar con azúcar, nata, azúcar de vainilla y jugo exprimido de aproximadamente ¼ de lima (debe obtener 2 cucharadas de jugo). 11. Usa la lima restante para decorar la tarta de queso.
Mezclar la composición adecuada hasta que el azúcar se disuelva por completo. Utilice para ello un recipiente hondo, del que no salten salpicaduras de nata.
Mientras continúa mezclando, vierta la gelatina en un chorro fino.
Verter la nata resultante sobre la capa de galleta y meter la tarta de queso en el frigorífico durante 1-2 horas.
Coger un paquete de gelatina “Kiwi” y prepararlo según las instrucciones del paquete, reduciendo la cantidad de agua en 100 ml. Deja que la gelatina se enfríe.
Saca la tarta de queso del frigorífico y vierte la gelatina sobre la capa de queso endurecido.
Luego, coloque el bizcocho terminado en el refrigerador durante otras 4-5 horas para que todas las capas se endurezcan por completo.
No olvides desmoldar la tarta de queso antes de servir. Adorne con rodajas de lima y hojas de menta.